WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pidió este lunes al Senado la «pronta» revisión y ratificación de dos tratados sobre límites marítimos que Washington firmó con Cuba y México hace casi siete años para abordar la única zona restante del Golfo de México donde los tres países no habían delimitado áreas propias.
El propósito de ambos tratados es establecer límites nacionales en la plataforma continental del este del Golfo de México en «áreas más allá de las 200 millas náuticas de la costa», explica una carta del mandatario demócrata a la Cámara Alta.
En el caso de Cuba, la línea de división es de aproximadamente 30 millas náuticas de longitud, mientras que con México, se establece un límite marítimo de aproximadamente 79 millas náuticas de longitud. Los dos pactos se firmaron el 18 de enero de 2017, apenas dos días antes del fin de la administración del expresidente Barack Obama (2008-2017, de la que Biden fue vicepresidente.
POSIBLES YACIMIENTOS DE PETROLEO
«Los límites abordan la única zona restante en el Golfo de México donde no se habían acordado los límites marítimos entre Estados Unidos y sus vecinos», refiere la misiva, publicada por la Casa Blanca.
En el caso del Tratado EEUU-Cuba también se establecen procedimientos para posibles yacimientos de petróleo y gas a lo largo del límite de la plataforma continental. Similares protocolos ya fueron desarrollados y establecidos con México en un acuerdo separado que ya está vigente.
«Creo que los Tratados redundan plenamente en beneficio de EEUU. A la luz de la geografía costera relevante, los Tratados asignan aproximadamente dos tercios del área en cuestión a EEUU», reiteró Biden en su carta al Congreso, donde además mencionó la «seguridad jurídica» que aportan en cuanto a la jurisdicción nacional sobre la plataforma continental.
«Recomiendo que el Senado considere pronta y favorablemente los Tratados y dé su opinión y consentimiento para su ratificación», concluye la misiva al Senado, actualmente envuelto en una batalla con la administración demócrata por un paquete de ayuda a Ucrania e Israel que el ala republicana quiere ligar a una reforma migratoria.